Cualquier acontecimiento en el aula, cualquier situación nueva que se plantea en nuestra clase, trae siempre algo positivo que nos hace aprender algo nuevo.
Un ejemplo claro de esto ha sido la situación de Luis. Un día llegó a clase con su pierna escayolada y montado en su silla de ruedas. Desde el primer momento sus compañeros/as se volcaron con él.
En nuestra asamblea buscamos soluciones para los problemas que podría tener Luis en su día a día en el cole mientras tuviese su pierna escayolada, y no imagináis la cantidad de soluciones que pueden aportar unos pequeñajos de 5 años. Hicimos preguntas sobre: ¿Cómo alcanzará Luis a coger su desayuno? ¿qué hacer para que pueda ir a lavarse las manos? ¿cómo podrá escribir y realizar la ficha si no llega a la mesa? ¿Cómo conseguir que no se aburra en el patio? ¿quién llevará la silla cuando sea necesario? ...y os aseguro que dieron montones de soluciones sin la más mínima dificultad.
Hemos descubierto juntos que es bonito ayudar a un compañero cuando lo necesita, que eso nos hace sentir bien y nos une un poco más a todos. ¡GRACIAS A TODOS LOS NIÑOS/AS POR SU COLABORACIÓN!
Tengo que destacar también lo bien que Luis ha llevado esta situación: NI UNA SOLA QUEJA durante todo el tiempo que ha estado en la silla, ni una cara triste, ni una sola demanda de nada.
No dejo de aprender de estos niños, es asombrosa la naturalidad y la aceptación con que ellos afrontan sus pequeñas dificultades.
Los mayores tenemos mucho que enseñar a los niños y niñas, pero, sin duda, también tenemos mucho que aprender de ellos.
QUE SUERTE A TENIDO LUIS DE CONTAR CON ESTOS PEQUEÑOS ENFERMEROS ME PARECIO UN IDEA MUY BUENA QUE CADA DIA LO CUIDARA UN COMPAÑERO Y ELLOS ENCANTADO DE HACERLO LO QUE NO SE LE OCURRA A LA "SEÑO CORAL "
ResponderEliminarINES.